Ni el alma profética del mundo
Ni mis miedos, el porvenir soñando,
De mi amor leal prevén el plazo
Aunque tan inminente parecía.
La fatídica luna ya eclipsada,
Mófase el augur del vaticinio;
El período incierto ha culminado
Y la paz con olivos se corona.
El rocío de esta era jubilosa
Renueva mi amor, vence a la muerte,
Pues yo seguiré vivo en verso humilde
Mientras turbas incultas ella estraga.
Y tú tendrás un monumento
Cuando tumbas de bronce sean escombros.
No comments:
Post a Comment